La tarta tatin es más francesa que el flequillo de Amélie. Debe su nombre a las hermanas Caroline y Stephanie Tatin —que, contra lo que dicta la leyenda, no la descubrieron por error—, se puso de moda en París en los años veinte del siglo pasado y su ingrediente estrella es la manzana caramelizada. ¿Qué la distingue de otras tartas? La masa se pone cubriendo el relleno, se hornea y después se le da la vuelta.
La versión original es dulce, pero nada impide cambiar la manzana por tomate con orégano y añadir sal a la fórmula para tomarla de aperitivo o entrante. Es lo que hace Ainhoa Aguirregoitia, más conocida en las redes como Ainhoa Singular, en su nuevo libro, Copia original. Ella misma nos enseña a preparar esta vuelta más o menos italiana al clásico francés: puedes disfrutarla mirando el vídeo de arriba.
TARTA TATIN DE TOMATE
Ingredientes
- 500 g de tomate envasado de buena calidad
- 50 g de azúcar
- 10 ml de vinagre balsámico blanco
- 1 plancha de hojaldre o de masa brisa
- Albahaca semifresca, fresca muy picada u orégano
- Sal
- Queso parmesano (opcional)
Instrucciones
Calentar el horno a 200 grados.
Escurrir los tomates sobre un colador sin moverlos demasiado para que no se rompan.
Poner a fuego medio una sartén o recipiente que después se pueda meter al horno. Añadir el azúcar repartiéndolo sobre toda la sartén. Sumar el vinagre y esperar a que se forme un caramelo rubio claro.
Incorporar los tomates enteros uno por uno, repartiéndolos con cuidado sobre toda la sartén. Salar y dejar que pierdan buena parte de su agua sin remover ni menear para que no se rompan.
Cuando deje de haber agua en la base de la sartén y aflore el caramelo (ver vídeo), retirar del fuego.
Poner la lámina de hojaldre encima y meter los bordes por dentro de la sartén (ver vídeo). Pinchar con un tenedor y hornear unos 20 minutos.
Sacar la sartén del horno y despegar los bordes de la tarta con un cuchillo. Poner un plato encima y dar la vuelta. Si algún tomate se queda pegado en la sartén, despegarlo con cuidado con una espátula y devolverlo a la tarta.
Aderezar con albahaca u orégano y pintar con un poco de aceite de oliva.
Se puede servir tal cual o con un poco de parmesano rallado por encima y más pimienta negra.
Gracias por el artículo. Espero que al autor no le importe que lo utilice para mi trabajo del curso.
Interesante. Esperando más posts sobre el mismo tema 🙂 .